El edificio se compone de dos volúmenes que enmarcan un patio interior arbolado. El volumen principal alberga las viviendas. El segundo volumen acoge acceso, salas técnicas y conserjería, sala polivalente y comedor comunitario. 

Todas las viviendas son pasantes con orientación Norte-Sur. Hacia el norte la construcción es compacta. Hacia el patio interior sur en cambio, todas las unidades se benefician de las virtudes climáticas de una estructura porticada de acceso. Las viviendas se extienden a esta pasarela mediante un conjunto de banco, puerta y ventanas que facilita diversos grados de privacidad, permite ser ocupado y posibilita la interacción espontánea entre vecinos. 

Las protecciones solares y vidrieras plegables convierten la galería en un elemento bioclimático y permiten ventilar y evitar la incidencia solar en verano. En invierno, cerrando las vidrieras se capta y conserva el calor de la radiación solar. Estas acciones son de carácter colectivo y el conserje climático del edificio se encarga de adecuar los dispositivos cada día siguiendo el manual de uso impreso en cerámica en el vestíbulo.

Con el correcto funcionamiento de los elementos bioclimáticos la demanda de calefacción y refrigeración del edificio es nula. No se incorporan sistemas activos de climatización consiguiendo en invierno diferencias de hasta 20 grados entre el interior y el exterior.

La propuesta adopta las medidas, tanto en su construcción como en su uso, para alcanzar ya el 100% de reducciones de emisiones exigido por la Ley 7/2021 de cambio climático y transición energética de aplicación a partir del 2050.