Paisaje en ruinas reflexiona sobre la fragilidad del paisaje, la memoria, el tiempo y la arquitectura.
La sobreexplotación del acuífero ha hecho desaparecer el encharcamiento natural de las Tablas de Daimiel y del resto de humedales del paisaje, provocando un fuerte impacto en el equilibrio ecológico, afectando así a la biodiversidad del lugar.
Siguiendo el recorrido del río Guadiana, nos topamos en su margen izquierda con las ruinas de Calatrava la Vieja, una antigua fortaleza en lo alto de un cerro amesetado.
Paisaje en ruinas es un ejercicio de observación de un lugar natural: desde las ruinas a la vegetación se redibujan todos los elementos del paisaje para poder entenderlo. Se estudia la fragilidad del paisaje para poder preservarlo.
El proyecto se propone regenerar el entorno de Calatrava la Vieja mediante la reactivación de su paisaje.
Un espacio de transición entre dos paisajes: las ruinas y el humedal.